 ¡Yo no soy un dios olímpico! Mi familia me lo ha dejado claro.
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–Hades a Nico, en El último héroe del Olimpo. |
Hades es el dios griego de los muertos y las riquezas, así como también Señor del Inframundo. El hijo mayor de Cronos y Rea, es considerado como uno de los Tres Grandes junto con sus hermanos Zeus y Poseidón. Su contraparte romana es Plutón. Es interpretado por Steve Coogan en la adaptación cinematográfica de El ladrón del rayo.
Historia
Nacimiento y rescate
Hades fue el cuarto, pero primer hijo varón de Cronos, rey de los titanes, y de su hermana/esposa, Rea. Nació después de sus hermanas Hestia, Deméter y Hera, todas de las cuales fueron devoradas por su padre. Puesto que era su hijo primogénito, su madre había esperado que Cronos no hiciera lo mismo con él, debido a que creía que Cronos disfrutaría de criar a un hijo y heredero. Sin embargo, debido a que Hades era un dios, Cronos, temeroso de que un día podría derrocarlo, rápidamente procedió a tragárselo también. Por lo tanto, pasó su infancia en el estómago de su padre junto con sus hermanas y su hermano menor, Poseidón. Rea le suplicó a Cronos que vomitará a sus hijos, pero sin éxito, ya que ni siquiera el gran amor que Cronos sentía por ella fue suficiente para dominar a su naturaleza egoísta y malvada. Cuando Rea dio a luz a su último hijo, Zeus, engañó a Cronos con una roca y envió a su hijo en secreto a Creta, muy lejos del Monte Otris.
Cuando Zeus creció, se infiltró con éxito en el palacio de Cronos como su copero. Una noche, cuando Cronos cenaba con sus hermanos y sobrinos, Zeus preparó un néctar mezclado con poción para dormir para los titanes, y un emético potente para Cronos. Zeus entretuvo a todos con sus cantos, bailes y bromas, y cerca del final del banquete, Zeus animó a todos los titanes a tener un concurso de bebidas, y repartió las copas preparadas. Al igual que siempre, Cronos ganó el concurso, pero el emético le hizo vomitar a todos los hijos que había devorado. Los cinco habían estado creciendo sin digerir en el estómago de Cronos, al ser inmortales. Zeus, junto con sus hermanos, escaparon rápidamente del Monte Otris. Hades y los otros dioses aceptaron a Zeus como su líder, y le declararon la guerra a su tiránico padre. Sin embargo, los titanes les superan en armamento y los dioses ni siquiera tenían armas, por lo que Hades accedió a ayudar a Zeus a liberar a sus tíos cíclopes y centimanos del Tártaro.
Rescate de los Cíclopes y Centimanos
Hades descubrió que era muy hábil moviéndose por debajo de la tierra, por lo que fue capaz de guiar a sus hermanos hasta el Tártaro (a través de una red de túneles en el Inframundo). Allí, en la zona de máxima seguridad, encontraron encarcelados a los cíclopes y centimanos. Su carcelera, Campe, era el monstruo más feroz y temible del Tártaro, e incluso Hades, Zeus, y Poseidón se estremecieron de horror al verla por primera vez. Sin embargo, y, aprovechando la ausencia momentánea de Campe, Zeus logró hablar con el cíclope Brontes y le prometió liberarlos, pero antes tendrían que forjar armas para él y sus hermanos. A espaldas de Campe, los tres cíclopes forjaron tres armas increíblemente poderosas: el Rayo Maestro, tomado por Zeus, un Tridente, tomado por Poseidón, y finalmente el Yelmo de Oscuridad, tomado por Hades. Inicialmente, Hades se quejó de que sus hermanos habían recibido armas, mientras que él un simple casco, pero cuando descubrió que podía hacerlo invisible y disparar ondas de terror, quedó muy complacido con el. Con su nueva arma, Zeus destruyó a Campe mientras que Poseidón hizo añicos las cadenas de los cíclopes y los centimanos para liberarlos. Por haberlos liberado, los seis prometieron ayudarlos en su guerra contra los titanes.
Primera Guerra Olímpica
Poco después de su regreso del Tártaro, Hades y sus hermanos declararon oficialmente la guerra a Cronos y los titanes, lo que dio resultado a la Primera Guerra Olímpica, la cual duró diez largos años. Los titanes inicialmente tenían ventaja en la batalla debido a que eran guerreros mucho más experimentados, pero a medida que pasaron los años, los dioses se convirtieron rápidamente en guerreros expertos y finalmente vencieron. Hades fue muy temido entre los titanes debido a su yelmo. Mientras se preparan para la batalla final, Hades y sus hermanos subieron al Monte Olimpo (la montaña más alta de Grecia después del Monte Otris), y Zeus utilizó su Rayo para cortar la parte superior del Monte Otris y demoler el palacio de Cronos. Poco después, los dioses invadieron las ruinas del Monte Otris y los cíclopes capturaron a Atlas, Hiperión, Jápeto, Críos, y Ceo. Los cíclopes obligaron a los titanes a arrodillarse ante los tres dioses. Zeus tomó la guadaña de su padre y cortó a Cronos en mil pedazos, antes de echarlo al Tártaro, junto con el resto de sus seguidores (excepto Atlas, quien se vio obligado a sostener el peso cielo como castigo).
Después de la batalla, los dioses eligieron el Monte Olimpo como su residencia oficial y los cíclopes construyeron magníficos palacios para todos ellos. Como resultado, los dioses comenzaron a llamarse a sí mismos los olímpicos. Poco después, él y sus hermanos se dividieron el mundo entre ellos: Hades recibió el Inframundo (a pesar de su derecho como el hijo mayor), Poseidón los mares y océanos, mientras que Zeus los cielos y se convirtió en el rey del Olimpo y los dioses. Pero para desgracia de Hades, él era muy temido por sus hermanos, sobrinos y sobrinas, y casi nunca lo invitaban al Olimpo (excepto en el solsticio de invierno, el día más oscuro del año) y ni siquiera tenía un trono. Sin embargo, al ser el señor del Inframundo, Hades se convirtió en el dios más rico de todos debido a su autoridad sobre las piedras preciosas. Hades era tan temido por los mortales y semidioses, que rara vez utilizaban su nombre, y en su lugar lo llamaban "el rico", "el silencioso", o "el hospitalario".
Secuestro de Perséfone
El secuestro de Perséfone, en Percy Jackson's Greek Gods.
Aunque Hades se distanció de su familia, se sentía solo y quería una esposa que llenará el vacío. Un día, vio a la joven diosa Perséfone, hija de Zeus y Deméter, cuya increíble belleza y rostro tierno ganaron su admiración y no tardó en caer perdidamente enamorado de ella. Comenzó a llevar retratos de Perséfone en sus bolsillos, incluso una vez talló su nombre en su mesa de desayuno de obsidiana, a tener largas conversaciones imaginarias con ella, y a espiarla secretamente con su Yelmo de Oscuridad. Tanto fue así, que Hades descuidó sus deberes como dios de los muertos. Poco tiempo después, Hades visitó al Olimpo y le rogó a Zeus, su hermano y padre de Perséfone, que le permitiera casarse con ella. Zeus, quien en ese momento estaba de buen humor, aconsejó a su hermano que le secuestrara y también le ayudó. Gracias a esto, Hades logró secuestrar a su amada Perséfone, pero ella no quería quedarse con él y deseaba ser rescatada.
Sin embargo, con el paso del tiempo, Perséfone se fue enamorando poco a poco de Hades y se sintió aliviada de estar libre del autoritarismo y regaños de su madre, Deméter. Al principio, Hades trató de ganarse su amor con magníficos regalos, pero luego tuvo que pasar todo el día con ella, tratando desesperadamente de hacerla feliz. Hades incluso contrató a un jardinero experto para hacer crecer un magnífico jardín para Perséfone, lleno de sus árboles y flores favoritas. Mientras tanto, Deméter, angustiada y desconsolada, hizo que la tierra se volviera estéril cuando se enteró del secuestro, y furiosamente culpó a Zeus por permitir Hades se la llevará. Presionado por las oraciones de los mortales y los dioses, Zeus finalmente le exigió a Hades que regresará a su hija, y envió a Hermes para entregarle el mensaje. Hades quedó devastado ante la perspectiva de perder a su esposa, pero se vio obligado a someterse a la voluntad de Zeus. Sin embargo, Hades ordenó al jardinero engañar a Perséfone para que comiese seis semillas de granada, así ella tendría que quedarse con él durante seis meses del año. Deméter jamás aceptó que su hija se hubiera casado con él y aprovecha cada oportunidad que se le presenta para criticar su trabajo y principalmente su matrimonio.
Relación con Leuce
Un día, Hades estaba visitando a su tío Océano en el fondo del océano, y mientras estaba por allí, conoció a una de sus hijas, la hermosa oceánide Leuce. Cuando terminó la visita, Hades la secuestró y la llevó consigo al Inframundo. Tan pronto como Perséfone se enteró del "souvenir" que su esposo había traído a casa, esta ordenó que Leuce se tenía que ir, pero no de vuelta al océano, sino que tenía que morir por tratar de robarle a su esposo. Hades asintió y rápidamente corrió hacia los Campos Asfódelos, donde Leuce estaba esperándolo. Cuando Hades le comunicó que lo suyo no iba a funcionar porque su esposa lo desaprobaba, Leuce le dijo que entonces la llevara a casa. Pero Hades contestó que no podía hacerlo debido a que Perséfone la quería muerta. Así que, en vez de matarla, Hades ideó convertirla en un árbol para que viviera por siempre y de esa manera siempre la recordaría. A pesar de la oposición de Leuce, Hades la convirtió en el primer árbol de álamo. El álamo se multiplicó de manera rápida, hasta que los campos de Asfódelos estuvieron repletos de ellos. El álamo también se convertiría en uno de los árboles sagrados de Hades y tienden a crecer especialmente cerca de los ríos del Inframundo, quizás porque Leuce recordaba que venía del océano y estaba tratando de volver a él.
Relación con Mente
Después de su fallido romance con Leuce, Hades salió a caminar cerca del Río Cocito. Allí, vio a una hermosa y joven mujer sentada en el agua cuyo aroma era increíblemente dulce, un perfume que Hades nunca antes había olido. Hades, completamente enamorado y embobado -no conocía a mujeres hermosas muy seguido-, se acercó a ella y le preguntó quién era. La joven se presentó como Mente, el espíritu del río. Hades mencionó que no tenía idea de que los ríos del Inframundo tuvieran náyades, pero Mente murmuró que ellas no estaban orgullosos de ello y que no era fácil ser el espíritu de la naturaleza de un río de las lamentaciones. Le confió que en su lugar preferiría estar en el mundo de arriba, donde podría disfrutar de la luz del sol y la brisa fresca. Hades se ofreció a llevarla al mundo de arriba, con la condición de que le diera un beso. Mente, aunque algo sospechosa al principio, accedió de todos modos. Cuando lo besó, ambos se disolvieron en las sombras y aparecieron en un colina cerca de la ciudad de Pilos, donde Mente quedó completamente asombrada al ver el cielo, el sol, y las colinas verdes. Hades y Mente fueron completamente felices por aproximadamente veinte segundos, hasta que Hades se dio cuenta de que era primavera, y que su esposa Perséfone estaría en algún lugar de por allí, haciendo crecer plantas y flores.
Temeroso de que esta los encontrara y consciente de lo que había pasado con Leuce, Hades se marchó. Mente se molestó por haber sido abandonada, y ya que ella era hermosa y olía genial, llegó a la conclusión de que se merecía ser una reina. Comenzó a gritar a los cuatros vientos que Hades la amaba y que era mucho más hermosa que la reina del Inframundo. Justo en ese momento, Perséfone se apareció en la colina en un remolino de flores y con el tamaño de una colosal diosa de quince metros. Perséfone, enfadada, levantó su gigantesco pie y aplastó a Mente. Cuando Perséfone arrastró su pie por la colina, crecieron pequeñas plantas verdes con un maravilloso aroma. Perséfone decidió llamarlas plantas de menta y la colina donde crecieron las plantas por primera vez es todavía llamada como "Monte Menta".
Percy Jackson y los dioses del Olimpo
El ladrón del rayo
Percy y sus amigos llegan al Inframundo a buscar a Hades y al encontrarlo, Hades intenta matarlos por que cree que ellos robaron su yelmo pero logran escapar. Y después de un combate con Ares, Percy recupera el yelmo y se lo entrega a las Furias quienes se lo dan a Hades.
El último héroe del Olimpo
Aparece convenciendo a Nico de llevar a Percy ante él a cambio de información sobre su madre. Cuando Percy llega, este lo encarcela y Nico enfadado debido a que le había prometido no hacerle daño, saca a Percy del calabozo y juntos huyen al río estigio; donde Percy se baña y obtiene la maldición de Aquiles. Y después de haber obtenido la maldición, se bate en duelo con el dios y este queda desarmado y Percy huye. Sin embargo, Nico se queda en el inframundo deseoso de conocer más información sobre su madre.
Más tarde, Hades regresa junto con su ejército de muertos acompañado por Perséfone y Démeter y juntos combaten contra el ejercito de Cronos. Al final durante la celebración de victoria, le agradecen su participación en la batalla y le prometen construir una cabaña para sus hijos en el Campamento.
Personalidad
Hades es un dios honrado y justo, así como también uno severo. Respeta los juramentos y las leyes de la moralidad, e irónicamente, nunca había matado a un mortal antes de intentar matar a su sobrina, Thalia Grace. A su vez, Hades nunca rompió su juramento de no tener hijos semidioses, al contrario de sus hermanos Zeus y Poseidón. El respeto de Hades por la ley y su código de conducta es evidente a la hora de juzgar a las almas de los muertos, así como también de todas las criaturas que van a parar al Inframundo. Es un dios muy ocupado y trabajador, a diferencia de muchos de los otros dioses con deberes y responsabilidades menores, tales como Dioniso y Apolo. Hades es muy inteligente (sin duda el más inteligente de sus hermanos), tal como se muestra por su increíble capacidad a la hora de inventar nuevos y originales castigos (aunque a veces irónicos) para los pecadores en los Campos de Castigo. A pesar de su inteligencia, Hades no tiene experiencia en cortejar mujeres y se vio obligado a buscar el consejo de Zeus sobre cómo cortejar adecuadamente a Perséfone. A pesar de sus hábitos honorables, tiene un lado cruel y oscuro y guarda rencor por mucho tiempo, un rasgo que comparten todos sus hijos. Su personalidad es distante y amarga debido a las tragedias del pasado que le llevaron a comportarse de la manera en que lo hace, aunque trata de no demostrarlo. Su forma de pensar no cambio siquiera después de los sucesos de El último héroe del Olimpo, en los cuales fue aceptado entre los dioses por ayudar a salvar el Olimpo.
Hades es un padre severo y con frecuencia es exigente y crítico hacia su único hijo semidiós vivo, Nico, comparándolo con su hermana Bianca di Angelo y rara vez le muestra afecto. Aunque después de la Batalla de Manhattan, Hades ve a su hijo con orgullo y respeto. Hades también comienza a confiar a Nico más información, e incluso le contó acerca del Campamento Júpiter y los semidioses romanos, confiando en que no compartiría ese conocimiento con nadie más hasta que fuera el momento adecuado. Su amante, Maria di Angelo, declaró que Hades era un hombre amable y generoso, dando a entender que podría tener un lado más suave. Maria incluso especuló que si los otros dioses lo vieran como lo veía ella, no lo despreciarían y temerían tanto. Su lado más oscuro deriva de la amargura que siente por haber sido despreciado y temido por los demás dioses, que a su vez le condujo a guardar rencor.
Apariencia
Hades, en Percy Jackson's Greek Gods.
Hades es descrito como un hombre alto, imponente, de piel exageradamente blanca, intensos ojos negros que "brillan como el alquitrán congelado", y una mirada salvaje y loca, mientras que su cabello negro le cae libremente sobre los hombros. De acuerdo con Perséfone en Percy Jackson's Greek Gods, cuando Hades se apasiona sus ojos negros tienen "llamaradas de fuego púrpura." A menudo lleva túnicas negras con almas en la tela. En batalla, Hades cabalgó sobre una gran carroza de color dorada y negra tirada por caballos de sombras oscuras, y llevaba una imponente armadura de Hierro Estigio negra con una capa de color rojo sangre y el Yelmo de Oscuridad. También lleva dos anillos: un anillo de plata con forma de calavera (que más tarde se lo da a Nico), y un anillos con un ópalo (su anillo de bodas con Perséfone). En La sangre del Olimpo, al presentarse ante Nico en Portugal, Hades estaba vestido con el hábito de monje franciscano, algo que Nico encontró vagamente inquietante.
Habilidades
Como uno de los Tres Grandes, Hades es un dios muy poderoso y sus poderes sólo rivalizan con los de sus hermanos, Zeus y Poseidón. Hades es tan poderoso, que cuando Percy lo conoció, comenzó a sentirse sumiso y tuvo que luchar contra el impulso de seguir cada pedido de Hades, así como también un fuerte deseo de arrodillarse a sus pies.
- Geoquinesis: Como el señor del inframundo, Hades tiene el control absoluto sobre toda la tierra y piedras. Tiene las mismas habilidades de geoquinesis que sus hijos Nico y Hazel, sólo que en mayor medida.
- Ferroquinesis: Como dios de la riqueza, puede detectar y convocar cualquier metal precioso y joyas de debajo de la tierra, así como también manipularlos. Como resultado, Hades es el dios más rico de todos. Tanto es así que en El último héroe del Olimpo, Hades se ofreció a construir un palacio de oro puro para Maria di Angelo.
- Nigromancia: Como dios de los muertos, tiene autoridad divina y el control absoluto sobre los muertos. Su sobrenombre es "el hospitalario", una referencia al hecho de que él siempre tendrá un espacio en el Inframundo para un alma más.
- Poder sobre los muertos: Hades puede reanimar esqueletos, y manejarlos para que luchen para él, y destruir a los Guerreros Esqueleto. También puede silenciar las almas muertas con un gesto.
- Maldiciones: Hades también es capaz de maldecir a los vivos. Aunque es incapaz de matar a la gente por el decreto de las Parcas, puede hacer que el alma de una persona no abandone su cuerpo, como lo hizo con el Oráculo de Delfos. También puede sentir el aura de vida de las personas.
- Osteoquinesis: Es capaz de convocar y controlar telequinéticamente a los huesos.
- Críoquinesis: Aunque es limitada, puede genera un aura de frío intenso, por lo que la temperatura a su alrededor se congela, junto con el suelo a su alrededor.
- Umbraquinesis: Hades tiene control sobre la oscuridad y las sombras para diversos usos, como esconderse en ella.
- Piroquinesis: Hades tiene el control sobre el fuego negro del infierno, que es mucho más destructivo que el fuego normal, y convierte todo lo que toca en líquido.
- Inducir terror: Con su Yelmo de Oscuridad, Hades puede irradiar muerte y terror muy intensos. Según Grover, esa es la razón por la cual los seres más racionales le temen a la oscuridad. En Percy Jackson's Greek Gods, se dice que su yelmo es lo suficientemente potente como para asustar incluso a Zeus y Poseidón.
Relaciones
Perséfone
Perséfone, su amada esposa.
Tal como se muestra en Percy Jackson's Greek Gods, Hades se enamoró perdidamente de Perséfone tan pronto la vio. Comenzó a llevar retratos de ella en sus bolsillos, talló su nombre en su mesa de desayuno de obsidiana, a tener largas conversaciones imaginarias con ella, e incluso a espiarla secretamente con su Yelmo de Oscuridad. Tanto fue así, que Hades descuido sus deberes como dios de los muertos. Poco tiempo después, Hades visitó al Olimpo y le rogó a Zeus, su hermano y padre de Perséfone, para que le permitiera casarse con ella. Zeus, quien en ese momento estaba de buen humor, aconsejó a su hermano que la secuestrara y también le ayudó a hacerlo. Gracias a esto, Hades logró secuestrar a su amada Perséfone, pero ella no quería quedarse con él, y deseaba ser rescatada. Sin embargo, con el paso del tiempo, Perséfone se fue enamorando poco a poco de Hades, y se sintió aliviada de estar libre del autoritarismo y regaños de su madre, Deméter.
Al principio, Hades trató de ganarse su amor con magníficos regalos, pero luego tuvo que pasar todo el día con ella, tratando de hacerla feliz. Hades incluso contrató a un jardinero experto para hacer crecer un magnífico jardín para Perséfone, lleno de sus árboles y flores favoritas. El jardinero más tarde engaño a Perséfone para que comiera seis semillas de granada, por lo que tuvo que quedarse con Hades durante seis meses del año. Deméter nunca aceptó que su hija se hubiera casado con Hades, y que la dejara sola. Hades ama mucho a su mujer, y según él, Perséfone es más preciada para él que todas las demás riquezas, pero durante el tiempo en que ella se va, no le gusta estar solo, y busca la compañía de mujeres mortales. Perséfone odia sus asuntos con las mortales, y detesta a sus hijos semidioses.
Zeus
Zeus, su hermano.
La relación de Hades con su familia siempre ha sido un poco "difícil", debido a sus deberes y a su posición como el solitario y marginado de la familia. Después de que se dijera la Gran Profecía, Hades se distanció aún más de sus hermanos, especialmente de Zeus, a quien le guardó un gran rencor. Zeus demandó que todos los semidioses debían de ser enviados al Campamento Mestizo para su protección y entrenamiento, pero Hades creyó que era una trampa y que en realidad asesinarían a sus hijos. Así pues, desesperado, intentó convencer a su amante Maria di Angelo de llevarlos al Inframundo con él, prometiéndole tener su propio castillo, pero ella consideraba que ese no era un lugar adecuado para criar a los niños. En el intento de convencerla, Zeus se enfadó porque había desobedecido sus órdenes e intentó matarlos. Solo consiguió acabar con la vida de María y no con la de sus hijos, Bianca y Nico di Angelo. Hades nunca perdonó a su hermano sino hasta después de la Segunda Guerra Olímpica.
El incidente también casi destruyó al Oráculo de Delfos, en quien Hades centró su ira por decir la profecía y la maldijo para que el espíritu del Oráculo jamás abandonará su cuerpo. Su rencor con Zeus incluso se extendió a la hija de este, Thalia. Al descubrir que su hermano había roto su juramento, Hades se enojó, y envió a los peores monstruos del Inframundo para matar a Thalia, lo que finalmente le llevó a sacrificarse con el fin de proteger a sus amigos Luke Castellan, Annabeth Chase y Grover Underwood, quienes viajaban con ella.
Poseidón
Su relación con su otro hermano, Poseidón, no se conoce. Sin embargo, el hecho de que no intentó matar a Percy tal como lo hizo con Thalía, se puede deber a que su relación con Poseidón no es tan tormentosa como la que tiene con Zeus.
Maria di Angelo
Hades se enamoró profundamente de Maria y tuvo dos hijos con ella, Bianca y Nico di Angelo. Maria siempre veía el lado bueno y generoso de Hades, e incluso especuló que si los otros dioses lo veían como ella no lo despreciarían y no le temerían tanto. Cuando María murió a manos de Zeus, Hades quedó devastado por su muerte, lo cual le causó mucho dolor y amargura hacia su familia, que a su vez condujo a la maldición del Oráculo. Nico fue capaz de utilizar parcialmente la memoria de su madre para convencer a su padre de luchar con los demás dioses, diciendo que ella tenía razón acerca de que las familias debían estar unidas.
Nico di Angelo
Nico, su hijo.
Hades parece sentir afecto por sus hijos, aunque no le gusta demostrarlo. Al principio parecía favorecer a su hija Bianca di Angelo sobre Nico, quizás por parecerse mucho a su madre. Sin embargo, después de la Batalla de Manhattan, Hades ve a su hijo con orgullo y respeto, y también comienza a confiarle más información, e incluso le contó acerca del Campamento Júpiter y de los semidioses romanos, confiando en que Nico no compartiría ese conocimiento con nadie más hasta que fuera el momento adecuado. Hades también le dijo a Nico que quiere que sea feliz. También se reveló que Hades le regaló a Nico un chofer zombie, ya que estaba tratando de ser un poco más como los padres mortales normales, quienes normalmente llevan a sus hijos a lugares. Sus relación parece haber mejorado considerablemente.
Hijos
Hijos Inmortales
| Pareja | Hijos |
| Perséfone | Macaria, Melínoe y Zagreo |
Semidioses
| Pareja | Hijos |
| Maria di Angelo | Bianca di Angelo, Nico di Angelo |
| Klara Hitler | Adolf Hitler |
| Anna Parshukova | Grigori Rasputin |
| Yekaterina Gueladze | Joseph Stalin |
Símbolo de poder
El símbolo de poder de Hades es el Yelmo de Oscuridad, el cual le permite volverse invisible y fundirse con las sombras, no ser tocado, visto o escuchado, e irradiar miedo tan intenso que puede hacer que una persona se vuelva loca o que su corazón se detenga. En La Espada de Hades, se revela que Perséfone le forjó un nuevo símbolo de poder en forma de espada. La espada también tiene una de las llaves de la muerte integrada en la empuñadura, por lo que el portador puede resucitar a los muertos de los rincones más profundos del Tártaro, o enviar un alma al Inframundo con solo un toque de la hoja.
Película
Percy Jackson y el ladrón del rayo
Hades, en la adapatición cinematográfica de El ladrón del Rayo.
En la película, Hades es interpretado por Steve Coogan. Es visto con su esposa, Perséfone, en el Inframundo mientras negocia el Rayo Maestro por la madre de Percy, Sally Jackson. En comparación con los libros, la vestimenta de Hades es más moderna y casual que la de sus hermanos, quienes se visten con armaduras de combate griegas. Llevaba ropa oscura, y al estilo gótico con joyas. Su personalidad también es mucho más siniestra, similar a la de Ares. Perséfone está retenida contra su voluntad y lo odia, y terminó por dejarlo inconsciente con el Rayo.
Trivia
- Hades también es conocido como "el rico", "el silencioso", y "el hospitalario".
- Su madre, Rea es la única que siempre lo ha amado incondicionalmente.
- Al igual que Cronos, Hades es temido por todos sus hermanos, sobrinos y sobrinas, los cuales rara vez lo visitan. Sin embargo, en El último héroe del Olimpo, Hades ayudó a salvar el Olimpo de Cronos, y fue recibido con los brazos abiertos por su familia.
- Como dios de la riqueza, es el dios olímpico más rico de todos, incluso su nombre romano, Plutón, significa "rico".
- Aunque se mencionó que Hades si fue invitado al Olimpo durante el solsticio de invierno, este no hizo acto de su presencia.
- Según lo revelado en Percy Jackson's Greek Gods, Hades contrata a los mejores actores y músicos fallecidos desde el Elíseo para su entretenimiento.
- Su contraparte egipcia es Set.
- Él es el único de los tres grandes que no rompió su juramento de no tener hijos semidioses.